¿Es realmente Cyberpunk 2077 una decepción?
Actualmente el mundo de los videojuegos puede pecar de estar sobrecargado, es un mercado tan grande y tan explotado a día de hoy que incluso puede provocarnos fatiga y desesperación no llegar a todos los lanzamientos que salen cada mes o incluso cada semana. Toda esta acumulación de títulos de tantos géneros distintos lleva consigo una desagradable repetición de ideas y mecánicas parejas en la mayoría de videojuegos que salen al mercado. Al igual que ocurre en otros campos como el de la música, la literatura o el cine son los estilos y la identidad de algunos elegidos y autores representativos los que consiguen marcar patrones de referencia que son utilizados por el resto de desarrolladoras para continuar con sus licencias con una base bien premeditada.
En el pasado podríamos hablar de Nintendo o Sega y su influencia en el videojuego moderno respecto a los plataformas y su estética única, Capcom y la instauración del survival-horror o el hack and slash, o incluso Konami que aunque a día de hoy está de capa caída consiguió ser de las primeras en instaurar la cinematografía en el videojuego con Metal Gear Solid. Para no alargar este apartado en exceso, en la actualidad cabe destacar que el cambio y la novedad no es tan significante, la base de juego es enorme y por ello me refiero a la cantidad de géneros y estilos de gameplay disponibles, tan variados y variopintos que cuesta pensar en el futuro de Triple A, por ello valoramos tanto el Indie pues se centra en la personalidad del autor, su objetivo es personal, busca reflejar su idea de la forma más directa posible sin tener que ser guiado o censurado por una productora, una licencia que delimite el parámetro a seguir o una compañía que busque la respuesta fácil a un problema. En todo este embrollo pocas son las editoras Triple A que tienen este poder y son capaces de marcar la diferencia; Rockstar es capaz de ello pues constantemente nos lo enseña con cada entrega de la saga GTA o su último bombazo en la mesa Red Dead Redemption II. Nintendo aún consiguiéndolo más en el pasado aún tiene las fuerzas para regalarnos un Breath Of The Wild y reinventar el concepto de sandbox, o un Mario 3D World y un Super Mario Odyssey capaces de darle la vuelta a todo lo que supone Super Mario y lo que llega a representar. En este contexto tenemos a la compañía polaca CD Project Red, quienes se popularizan con la saga The Witcher, sobre todo con su tercera y hasta el momento última parte, es un juego tan especial para mi, supuso mi vuelta al mundo de la fantasía medieval pero con la peculiaridad de poseer uno de los mundos más interesantes que he podido experimentar, me enamoró de principio a fin, uno de esos indispensables que terminaré recordando durante décadas. Con este background y todo el apoyo posible a la compañía que además gozaba de buena reputación respecto al trato con el consumidor llega 2020 y tras innumerables retrasos se lanza al fin Cyberpunk 2077. ¿Ha sido realmente una decepción?
Bien, este es un tema complicado y tras jugar muchas horas voy a lanzar una serie de respuestas rápidas. Si tienes pensado jugar Cyberpunk en consolas de pasada generación mi respuesta a día 7 de abril es no, según he estado mirando aún no merece la pena, el juego sigue con muchos bugs, un framerate bastante bajo al ideal para este tipo de juegos y una resolución pauperrima. En consolas de nueva generación y Pcs que puedan mover el juego de forma correcta aún con ciertos crasheos y pequeños bugs la experiencia puede ser buena y aceptable. Respondiendo a la pregunta de arriba, el juego puede llegar a ser una decepción considerable viéndolo en todo su esplendor y sin obviar el apartado técnico, pues sumado a ello la campaña de promoción ha sido de dudosa veracidad, ni siquiera han tenido la decencia de mostrar las versiones de pasada generación antes del lanzamiento e incluso la actitud de superioridad de CD-Project con el usuario o frente a otras desarrolladoras no ha sido la más optima. Y que ocurre si dejamos pasar el terrible estado técnico del juego y nos centramos únicamente en lo que ofrece; bien, hablemos primero de lo bueno, Cyberpunk 2077 tiene un mundo gigantesco en el que es muy pero que muy facil perderse, su apartado artístico se suma a este efecto regalándonos una auténtica megalópolis con edificios sumamente altos y detallados en todas sus formas capaces de asombrarnos con la cantidad de cables y conexiones que pueden llegar a producirse, incluso en mi partida, aunque solo lo vi un par de veces se produjo lluvia ácida dando un efecto bastante chulo; la gente de Night City tiene un estilo único y cada barrio se siente muy distinto al anterior, no solo en los edificios, sino en la ropa de la gente, los coches, los oficios o incluso las bandas y sus actividades. El nivel de detalles de los interiores de los coches y los edificios es enfermizo, en un edificio de clase alta no encontraremos los mismos muebles que en un edificio de menor clase social, y es que este tema es esencial para el juego porque incluso el principio nos plantea nuestro origen, esto se suma a también a las animaciones que demuestran la artesanía a la que se puede llegar con el videojuego.
La apuesta que hace por la narrativa es sublime pero lo increíble de este título son sus personajes, estos gozan de personalidades arrolladoras, con sus intereses, miedos y relaciones entre ellos en la que nos vemos normalmente involucrados, Judy, Panam, River o Jackie son algunos de los más destacados pero tengo que detenerme en Johny Silverhand interpretado por el eterno Keanu Reeves, me parece increíble lo que han hecho con él, la escritura del personaje y su implicación en la trama es total, no es un simple personaje secundario, es junto a V, el coprotagonista de la historia, dependerá de nosotros como será nuestra relación con él pero ya aviso de que os será muy complicado ser desagradables con él. Aunque la campaña no es excesivamente larga el número de misiones secundarias es muy elevado, y estas nos otorgaran una nueva dimensión de la trama y de los personajes de los que incluso nos darán la posibilidad de enamorarnos. Estas misiones secundarias nos hacen visitar y experimentar lugares y acontecimientos únicos que en algunos casos también desembocaran en algunos de los posibles finales del juego aunque algunas de ellas no tienen finales cerrados y acaban de forma decepcionante aunque son las menos.
Sin más que añadir y obviando los problemas técnicos, Cyberpunk 2077 es un juego con sus problemas pero también con sus virtudes, aún así es muy disfrutable y la experiencia puede llegar a ser buena si obviamos sus problemas pero sin lugar a dudas no creo que Cyberpunk 2077 sea un juego que marque la industria en el buen sentido de la palabra mecánicamente y estructuralmente hablando. Toda desarrolladora tiene sus errores y algunas veces estos tropiezos son necesarios para estructurarse mejor y afrontar un mejor futuro. Una pena lo ocurrido por plantearse un objetivo inabarcable y una pena los accionistas que provocan estos desastrosos y apresurados desarrollos provocando que la mayor parte del mundo considere a los programadores los únicos culpables del resultado del juego. Espero que os haya gustado y sin mucho más que decir, me despido hasta el siguiente post!
Pedro Antonio González Orellana. @pedroskyrim7
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