Life Is Strange y el retrato de la adolescencia.

    Me gusta pensar que la adolescencia es una de la etapas más especiales del ser humano, en ella nos desarrollamos casi inconscientemente a futuro y comenzamos a moldearnos a través de todo lo que nos rodea pues nuestros actos e interacciones con el mundo configuran quienes terminamos siendo a día de hoy.

    Life Is Strange es un juego desarrollado por Dontnod Entertainment publicado por EA en 2014; siendo un juego de perfil bajo pues no es un triple AAA pero tampoco un Indie, lo denominaríamos como un doble AA. Consiguió cierta popularidad lo que garantizó una secuela; pero en este caso solo hablaré del primer título, es un juego que basa su mecánica en la toma de decisiones pues estas configuran la trama, y la relación con los distintos personajes obteniendo distintas situaciones y finales lo que incentiva la rejugabilidad. La sinopsis de forma muy breve sería la llegada de Max Cauldfield a su primer año de universidad, volviendo a su pequeño pueblo pesquero en el que la nostalgia y melancolía inunda la narrativa y a la propia Max, quien tendrá que desentrañar un misterio lo suficientemente inquietante consiguiendo que nos cueste despegarnos de la pantalla.

    Me asombra como consigue reflejar una etapa de nuestras vidas de forma tan correcta, en un principio puede hacernos pensar que se trata de la recolección de clichés mas prototípica del mundo, seria fácil pensarlo en los primeros compases del juego pero este consigue hacerme asociar a muchas personas que conozco a personajes del título. Aquí los personajes se mueven en el terreno en el que sienten cómodos y si interactúamos bien con ellos podremos conocer sus gustos, sus habilidades o incluso sus miedos. La personalidad del juego es abrumadora, y en un ambiente como es el universitario existen un perfil de personas muy amplio y diversificado; creo que jamás podré olvidar una de las primeras escenas del juego en la que Max al salir de clase simplemente se pone sus auriculares y observa todo lo que ocurre por los pasillos y el área central de la escuela. La chica que sale llorando con sus libros entre las manos mientras otras dos se ríen sin que nadie se de cuenta, dos personas comentando el partido de ayer, el chico al que están acosando en una esquina donde nadie puede verles o simplemente personas ordenando o abriendo sus taquillas. Me parece un ejercicio tan especial, cotidiano y simple que consigue dotar de una naturalidad al juego abismal, reflejando una realidad por la que pasan muchas personas en la actualidad. 

    Si comentaba antes el reflejo de la realidad me gustaría hacer un nuevo inciso aquí porque se pone en juego la desagradable situación por la que pasan muchas personas y es que el bullying y el cyberbullying aquí estás mas presente que nunca. Se narra la situación de una chica a la que drogan además de ser abusada sexualmente mientras es grabada, para luego sus agresores subir el vídeo a una especie de homólogo de Facebook. También se narra la situación de un personaje que vive con su madre y su padrastro al que no soporta y se hacen la vida imposible mutuamente en búsqueda de no se... ni siquiera ellos lo saben ni comprenden sus actos. Son vivencias desagradables por la que desgraciadamente muchas personas se ven comprometidas, y representarlo en el juego de una forma tan cruda pero a su vez realista creo que realza el título y su significado. No todas son situaciones malas, también en él se muestra la adrenalina de la juventud, la necesidad de vivir junto a los amigos y experimentar una noche estrellada sentados a los pies de un barranco, recibir un mensaje con una propuesta para ir al cine, colarse en la piscina de noche o simplemente que te llamen por la mañana para salir a desayunar.

    La adolescencia es esa etapa en la que nos buscamos a nosotros mismos y en la que más nos perdemos, pecamos por exceso de confianza y eso nos repercute tanto negativamente como positivamente porque es imposible aprender sin tropezar antes, nos creemos en muchos casos superiores a muchas personas y algunas veces incluso por encima de nuestros padres; pensamos en mucha gente y en nadie a la vez pues estamos inundados en nosotros mismos y creemos en un futuro con las personas que nos importan. El juego consigue tratar todo esto pues en él sus personajes se presentan de dicho modo y su protagonista a pesar de la toma de decisiones actúa según su personalidad aunque no por ello se escapa de la realidad asociada a su edad; pues somos muy moldeables y normalmente olvidamos las consecuencias a nuestros actos, concepto muy presente en la aventura. El título tampoco olvida como es el momento en el que comienza nuestro despertar sexual, la configuración del mismo, los deslices y la irresponsabilidad ante un mundo que creemos que gira en torno a nosotros y lo que pensamos del mismo. La aparición de las drogas y el consumo de las mismas tampoco se olvida pues forma parte de esta época basada en la curiosidad y el desconocimiento.

    Y finalmente, lo que quiero dejar para el final es un aura que me toca de cerca y me hace sentir reconfortado como es el manejo de la nostalgia y la melancolía, sentir que quizás ya haya pasado el mejor momento de tu vida, pues acabas ahogándote en tu propia mente pensando en el instante en el que todo cambió y dejaste de disfrutar las cosas como antes. El filtro del juego, muy pasteloso aunque rico en colorido ayuda a esta sensación, y el diseño artístico de escenarios es la clave de todo ello pues el faro, la habitación de Max, el muelle, o estar simplemente en el jardín de una casa, y escuchar el simple sonido de los pájaros y como el viento mece los columpios, inevitablemente provoca que te sientas consumido por una agonía incesante. La banda sonora se suma al conjunto con una selección de música indie alternativa con piezas de Syd Matters, DOLKINS o incluso José González que vuelve a repetir en una artículo mío con ese estilo tan único.

    Pienso que tiene un target bastante concreto y creo que está pensado para que sea jugado a las edades que expone el título. Es un juego que personalmente significa mucho para mí, quizás no hable mucho de él normalmente, pero tiene un hueco en mi corazón que será imposible de eliminar. Pienso en este juego mucho y creo que está era la oportunidad perfecta para hablar sobre él, no en su totalidad porque un pedacito me lo guardo para mí. Gracias por leerme de nuevo y espero que con este escrito alguien se anime a probarlo. 

Pedro Antonio González Orellana. @pedroskyrim7.